No hay causas sin líderes, ni líderes sin historias que los conducen hasta ahí y Camila Cortinez, no es la excepción. Fundadora y directora general de la ONG Te Protejo, hace más de 6 años encabeza la cruzada contra el testeo animal en Chile y Latinoamérica, donde la pasión y determinación por convertir la industria cosmética la han llevado a cosechar más de un logro en esa materia.
Diseñadora de profesión, su interés por los derechos animales nace desde la experiencia, en particular, “después de años de hacer voluntariado en el Comité de Pro Defensa de Flora y Fauna (CODEFF), una organización de protección animal; y después de adoptar a Imposible, mi primer gato”.
Sensibilizada con la protección y el derecho animal, el camino de Camila se caracteriza por combinar esa inquietud con una industria en particular, de la cual nadie hablaba hace 10 años: el maquillaje. “Luego de hacer muchos cambios en mi vida personal, como haberme hecho vegetariana y empezar a preocuparme de lo que consumía, vi una nota sobre el testeo en animales y pensé que era poco coherente que estuviese haciendo todos estos cambios sin preocuparme de los productos cosméticos que usaba día a día. Al no encontrar información sobre este tema a nivel nacional, sentí que debía hacer algo al respecto. Así empezó mi investigación y mi compromiso por esta causa”, afirma.
Lo que empezó como una inquietud, hoy se materializa como un proyecto que muchos incrédulos creían imposible. Te Protejo es la primera ONG chilena y latinoamericana en promover el uso de productos de cuidado personal y aseo no testeados en animales, y la primera en certificar marcas que no testean en animales de la región, contando con más de 100 voluntarios en las áreas de activismo, difusión y educación al consumidor. También es la responsable de la realización de la Feria Ecobelleza, evento único de promoción y comercialización de cosmética libre de crueldad animal y amigable con el medioambiente. Y, junto a organizaciones como Human Society, está a la cabeza de la campaña #BeCrueltyFree, apoyando activamente el proyecto de ley presentado por la bancada PARDA, que tiene como fin eliminar los tests en animales en las pruebas de seguridad de cosméticos para comercialización en Chile, tanto en productos finales como ingredientes.
“Creo que siempre tuve ganas de hacer algo grande. No sabía cómo, pero sí tenía claro lo que quería lograr con esto. Desde que me comprometí con la causa sabía que lo haría all-in, por lo que en la medida que fue creciendo, como equipo fuimos pensando en la mejor manera de que ese crecimiento fuera orgánico, bien organizado y de todos”, nos cuenta.
Y el esfuerzo ha rendido sus frutos no solo en términos globales, sino también a nivel regional y nacional. “A nivel global, es una lucha que lleva 25 años, pero en Chile la conversación se abrió junto con el nacimiento de nuestra ONG, y con nuevos avances en materia animalista. En el resto de Latinoamérica hay avances legislativos, como en Brasil, pero me parece que en general el conocimiento sobre el tema todavía está muy encapsulado. Aun así, siento que en Chile estamos mejor informados hoy en día, gracias al trabajo que hemos hecho como organización”.
El trabajo de Te Protejo no solo ha abierto un tema de discusión dentro de Chile, generando consciencia e información actualizada y confiable en torno a este tema, así como reconocimientos y avances en la materia. Dentro de los principales hitos de la ONG están, además de la constitución formal de ésta en 2015, la certificación de marcas masivas como Petrizzio; y haber ganado el premio Lush Prize en la categoría Public Awareness en el año 2017, lo que ha permitido “la expansión del trabajo de nuestra organización a otros países de América Latina. Todos esos momentos solidificaron y reconocieron nuestro trabajo a nivel nacional e internacional”, comenta Camila.
Entre tanto trabajo y activismo, los sentidos de Camila no pasan a segundo plano, pues no olvidemos que el maquillaje no solo es una causa en la cual combatir, sino también un medio de expresión completamente ligado a la estética. No nos sorprendió que una de sus texturas favoritas fuera el pelaje de su gato Benito: “amo despertar con su pelo en mi cara (cuando tengo ánimos)”. Cuando de aromas se trata, su favorito es SnowFairy de Lush: “es mi favorito porque es un aroma que me identifica con nuestro equipo de trabajo: dulce, empalagoso y tiene brillos. Es pura alegría”. Ver la brisa mover los árboles en su ventana la hace querer partir el día y realmente sentir la mañana. Le encanta escuchar música, con el poder para cambiar el ánimo e inspirarnos que tiene, mejor aún si es la voz de mujeres empoderadas. Por último, se declara amante de comer: “es de las cosas más importantes en mi vida, por lo que me gusta descubrir nuevos sabores y texturas. Me encanta la comida de campo, la que me enseñó mi abuelita. Sobre todo, el aroma que sale de la olla mientras se cocina. La comida de campo (en versión vegetariana) es, sin duda, mi mayor placer”.