Ad portas de la Semana de Fashion Revolution conversamos con Tomás Saieg, Jefe de la Oficina de Economía Circular del Ministerio del Medio Ambiente; Bastián Barria, parte del equipo de la Organización Desierto Vestido; y Mariano Breccia, cofundador de @12narecicla y uno de los seleccionados por Fashion Open Studio para presentar su trabajo en la Fashion Revolution Week 2022, sobre el paradero de la ropa usada y cómo la sobreproducción, el sobreconsumo y los residuos y basura textil están afectando nuestro país, particularmente una parte importante del Desierto de Atacama.
Te invitamos a leer las cuatro ideas claves que surgieron en este conversatorio y a seguir ampliando el debate sobre esta problemática.
- Regular la entrada de artículos de segunda mano, específicamente el textil:
¿Sabías que anualmente ingresan cerca de 60 mil toneladas de ropa de segunda mano a nuestro país? De este total, solo un porcentaje logra ser comercializado y lo demás, no hay una cifra clara sobre dónde termina o qué sucede con este remanente, ya que no existen registros y datos levantados por las autoridades que nos permitan contar con dicha información.
Es por esto que Tomás Saieg, comenta la importancia de establecer estándares mínimos para permitir el ingreso de productos de segunda mano al territorio nacional, con el fin de evitar la importación de artículos que generen un impacto negativo sobre el medioambiente.
- Cambiar patrones de consumo:
A pesar de que cada vez es más popular la compra de ropa de segunda mano, es necesario cambiar los patrones de consumo que existen actualmente. Esto significa elegir otras formas de obtener ropa, como por ejemplo, haciendo una economía de ropa circular a través del intercambio, reparar las prendas que tienen fallas, reutilizar un mismo producto hasta que su vida útil se vea agotada, etcétera.
Mariano Breccia frente a este tema es enfático en afirmar que la reutilización es una opción viable para hacer frente a esta problemática. Al elegir una prenda de upcycling, hecha a partir del descarte textil, damos nueva vida a productos que ya están creados, sin la necesidad de invertir grandes recursos en producir uno nuevo.
- Empoderamiento territorial:
Bastián Barría, quien se unió al conversatorio desde la Región de Tarapacá donde habita y trabaja junto al resto del equipo de Desierto Vestido, menciona que el empoderamiento territorial ha sido esencial para ampliar el debate en torno a esta problemática. Como organización, han impulsando desde la misma ciudadanía información sobre el origen de la ropa que se estaba acumulando, además de promover dentro de las mismas comunas el comercio y reutilización.
- ¿Qué tan grande debe ser mi clóset?
Cambiar los patrones de consumo conlleva comprar menos y darle más utilidad a lo que ya tenemos, ya sea reparando, reutilizando, reusando, intercambiando, en definitiva, alargando la vida útil de una prenda.
«La reutilización está por sobre el reciclaje, como una estrategia preferente. Tampoco hay que olvidar que la reutilización es un nivel intermedio, porque hay una estrategia de orden aún superior y que es la reducción. Yo creo que hay que hacer todas estas cosas», comenta Tomás Saieg y agrega «esta bueno hacerse la pregunta ¿cuál es el énfasis? y para eso está la jerarquía de manejo de residuos, y yo creo que lo fundamental es la reducción y abordar el problema del norte directamente tal vez no permitiendo que se llegue a importar y el cambio cultural. Usar [comprar] menos ropa y preguntarnos: ¿qué tan grande debe ser mi clóset?».
Te invitamos a profundizar más sobre este tema, revisando el conversatorio disponible en nuestro canal de Youtube y te invitamos a comentar sobre este tema.
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