No me canso de leer recopilaciones sobre las vidas, anécdotas y legados de grandes mujeres de la historia. Pero si hay algo que me pareció especialmente interesante de Aquí estoy yo fue acceder a poderosos discursos públicos que muchas de esas grandes mujeres habían pronunciado. Me sorprendió también la falta de registro de muchos otros y, definitivamente, la ausencia de voces femeninas en las esferas públicas hasta hace solo un par de décadas atrás.
¿Quién es la autora?
Anna Russell es una escritora de nacionalidad estadounidense. Estudió literatura en la Universidad de Nueva York, ha escrito y editado textos para la sección «Talk of the Town» del New Yorker, ha sido corresponsal de arte y cultura para The Wall Street Journal en Londres, y actualmente escribe para The New Yorker en Londres, su actual lugar de residencia.
El libro empieza con Anna preguntando: «¿Te viene a la cabeza algún discurso pronunciado por una mujer?», pregunta que –al menos a mí– me dejó pensando por más de un par de segundos. Y continúa contando que esa misma pregunta no solo se la hizo a sí misma, sino también a sus amigos, colegas y familia en busca de respuestas, lo que inevitablemente terminó siendo su nuevo libro.
¿De qué se trata el libro?
Aquí estoy yo recopila más de 50 discursos públicos de mujeres, desde el siglo XIX hasta la fecha (a excepción de un discurso de la Reina Isabel I que data de 1588). El libro hace tangible las ideas, pasión y crítica que mujeres de diversas épocas y contextos hicieron a lo largo de estos siglos.
Los discursos son diversos, así como las protagonistas de ellas, abordando temas como los derechos civiles de las mujeres, las desigualdades que vive la comunidad LGBTQ, el activismo medioambiental y las políticas públicas. En él, podemos encontrarnos con inspiradores extractos de discursos de autoras como Virginia Woolf, hasta otras figuras más controversiales como Margaret Tatcher.
¿Algún extracto inspirador?
«Las mujeres de esta recopilación no son santas ni heroínas, por mucho que nos gustaría. Son o fueron personas de verdad, a menudo involucradas en política, comprometidas y enfrentadas a decisiones difíciles (…). Los discursos que hemos elegido son los que motivaron o conmovieron, los que capturaron un momento concreto y plasmaron para generaciones futuras sus aspiraciones y frustraciones. Son discursos que iniciaron revoluciones, las que tienen lugar en la plaza pública (en manifestaciones masivas y choques violentos) y las más silenciosas, las que ocurren en la mente. Son los discursos que hay que recordar».
«En Occidente, lo que llaman libertad para la mujer suele equivaler a imitar al hombre. Con sinceridad, eso me parece cambiar unas cadenas por otras. Para ser libre la mujer debe sentirse libre de ser ella misma, no en comparación con el hombre sino en el contexto de su propia capacidad y personalidad. Necesitamos que las mujeres se muestren más activas, no porque son mujeres, sino porque son la mitad de la raza humana (…)». (Indira Gandhi)
«Todos y cada uno de nosotros tenemos un impacto en el planeta, todos y cada uno de los días. No podemos pasar un día sin ejercer un efecto. Y podemos elegir. Todos los presentes podemos elegir: otros quizás no puedan, pero nosotros, sí. Si empezamos a meditar sobre las consecuencias de cada elección que hacemos a diario, qué compramos, qué comemos, qué nos ponemos, de dónde viene o cómo se hizo lo que utilizamos, en la crueldad contra los animales, ¿se utilizó mano de obra infantil en un lugar lejano?, ¿dañó a nuestro medioambiente? Si nos preguntamos esas cosas, empezamos a tomar mejores decisiones. También podemos preguntarnos: ¿de verdad necesito esto? ¿Lo tengo que comprar?». (Jane Goodall)
¿Dónde encuentro este libro?
