Vacaciones de Invierno: ¡salgamos a jugar afuera!

por | Jul 11, 2022

Ideas para disfrutar este invierno, y potenciar nuestro sistema inmune de la mano de la naturaleza.

La modernidad y la vida en la ciudad han cambiado la forma de vivir de las personas. Todo tiene un ritmo vertiginoso del que es difícil evadirse. Sin embargo, cuando nos detenemos frente a un árbol que nos parece bonito o escuchamos el canto de los pájaros en la mañana o simplemente observamos la cordillera frente a nosotros, el tiempo parece detenerse por un instante y nos cambia de alguna bonita manera, la perspectiva del día.

El contacto con la naturaleza es esencial para el ser humano. Sabemos que en la ciudad a veces es más difícil tomar contacto con ella. Sin embargo, no podemos dejar de hacerlo. Somos naturaleza, y parte también de esa belleza. Compartir con la naturaleza promueve el estar feliz y fortalece el sistema inmunológico, como puntualiza la kinesiología integrativa y terapeuta complementaria de Momento Ser, María Paz Uribe.

“El concepto de salud es un concepto integral. No podemos estar sanos físicamente si no lo estamos mentalmente y viceversa. El contexto emocional tiene una gran repercusión en el funcionamiento de nuestra fisiología, ya que existe una clara interacción entre el cerebro y el sistema inmune”, señala la especialista.

Y agrega “por ello, es necesario tener presente que el sistema inmune no sólo debemos trabajarlo cuando se acerca el invierno, sino que cada día del año. Algunas recomendaciones son: mantener el contacto con la naturaleza, practicar la meditación, tener suficientes horas de sueño y una alimentación que incluya frutas, verduras, alimentos fermentados (chucrut) y evitar en lo más posible el consumo de alimentos procesados, alto en grasas saturadas. Esto es aplicable tanto para adultos como para los más pequeños”.

Descripción foto: El concepto de salud es un concepto integral. Créditos: Unsplash.

Niñas y niños, ¡a conectarse con la naturaleza!

Para las niñas y niños el contacto con el medio natural desde pequeños es esencial. “Los niños que juegan al aire libre son físicamente más activos (…) tienen más agilidad, equilibrio y coordinación (…) desarrollan respeto y amor hacia la naturaleza (…)”, según lo puntualiza la pedagogía Waldorf, la cual está respaldada por la UNESCO.

Observar los cambios de ciclos, las estaciones del año y las transformaciones propias de cada tiempo, es un verdadero regalo para el alma y traerá por tanto, no solo regalos para su infancia, sino también para su vida futura.

¿Cómo podemos mantener esta valiosa conexión en ésta época? ¿De qué manera en lo cotidiano del día a día podemos fomentar el juego al aire libre durante el invierno? 

Todas y todos necesitamos la exploración y el contacto con los distintos colores que nos trae cada estación. Durante el invierno, no es lo mismo observar la lluvia desde la ventana, que ponerse botas de agua y salir a disfrutarla. Sentir la temperatura, el viento y el agua y así tener un contacto verdadero con todo lo que la naturaleza nos regala. 

El invierno es una temporada de mucho frío y a veces de lluvia. Y es por eso, que para poder disfrutar de las experiencias al aire libre necesitamos prepararnos y preparar a nuestros niños y niñas. Para ellos es muy importante —especialmente durante la primera infancia— el calor, por lo tanto, cuidar el abrigo es esencial.

Entonces, ¿cómo vestirlos?

Por capas. Las primeras capas deben ser de algodón y sobre ellas, ojalá lana, que mantenga el calor y la temperatura apropiada, también en los pies y en la cabeza. Ojalá un gorrito de lana, parka y botas. Y si está lloviendo mucho, o todo está muy mojado, el traje de agua es una buena opción para jugar con más libertad.

Foto de Ben Wicks en Unsplash

Hay muchas experiencias e ideas que podemos compartir para que estas vacaciones sean un regalo del invierno, y no necesariamente tenemos que salir de la ciudad. Así es que preparen sus abrigos y gorros de lana, botas de agua y paraguas y ¡salgamos a jugar!.

Estas ideas nos pueden inspirar

Caminatas: hacer caminatas al aire libre día a día entrega ritmo y calma, si vamos en grupo aprendemos a compartir y esperar a otros, observamos lo que nos rodea. 

Juego libre: salir a jugar al patio de la casa, del edificio o a la plaza más cercana. El juego libre fomenta la imaginación y la creatividad.

Salir a buscar tesoros: Preparemos un canastito y salgamos a buscar semillas, hojas, piedritas y todos los tesoros que el viento y la lluvia nos regalan. Al llegar a la casa podemos ponerlos en un lugar especial, como una mesita de la estación, y poner una velita que nos inspire para agradecer por esos tesoros que la naturaleza nos regala. 

Paseo a lugares cercanos: Podemos preparar un picnic sin desechables, y salir a algún parque o lugar cercano en medio de la naturaleza. 

Sembrar: Si tenemos un minihuerto en la casa, un huerto escolar o queremos iniciar un huerto en macetas, el invierno es una buena temporada de siembra. Durante julio se pueden sembrar: betarragas, perejil, cebollín, arvejas, acelga, rúcula, puerro, repollo, cebolla, zanahoria, lechuga, brócoli. Hay muchos lugares dónde encontrar semillas orgánicas de estas verduras. 

Cocinar: Estamos acostumbrados a tener de todas las frutas y verduras durante todo el año. Es bueno conocer, y que los niños y niñas aprendan de las frutas y verduras propias de cada estación. Pueden averiguar juntos e ir a comprar los ingredientes para cocinar. Por ejemplo, un queque de naranja. Disfrutar del proceso de cocinar en familia con las naranjas que el invierno nos regala, con su olor, sabor y color es un regalo para el corazón.

¡Anímense a disfrutar de las bondades del invierno! Volvamos a disfrutar de la naturaleza que nos rodea. Si nos detenemos y disfrutamos de ello, también lo harán nuestros niños y niñas. 

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¡Hola! mi nombre es Sol. Admiro y agradezco la sublime preciosidad de la naturaleza, amo el Sur de Chile con todo el corazón. Disfruto del arte y la belleza en todas sus manifestaciones. Practico yoga y me encanta andar en bicicleta. Después de la Universidad, descubrí y estudié Pedagogía Waldorf. Hoy hago Talleres de Arte para niños y niñas; además de trabajar con cerámica.

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