Para vivir junto a la luna solo necesitas honrar lo creciente y menguante de tu naturaleza. Date tiempo para florecer, desarrollar, confiar, celebrar, dejarte llevar y reflexionar durante tu ciclo lunar.
—Jo Cauldrick, The Moon Journal
Según Penelope Shuttle y Peter Redgrove, poetas y autores del libro The Wise Wound, el cuerpo femenino responde a las fases lunares. Nuestros antepasados, que eran grandes observadores, sabían que el ciclo de la mujer era capaz de conectarse con las cuatro fases de la luna: la nueva, cuarto creciente, la llena y el cuarto menguante. Honrando cada uno de estos momentos, escuchando nuestro cuerpo y nuestras necesidades, comenzaremos a ser más compasivas con nosotras mismas y conoceremos la alegría de vivir bajo nuestro propio ritmo natural.
Todo comienza por llevar un registro mensual de nuestro ciclo y el de la luna, y notar cómo se relacionan. El primer día de la menstruación es el día número 1 de tu ciclo.
Agrega a ello un diario en el que escribas cómo te sientes en cada etapa: ¿cuáles son tus síntomas, emociones y sensaciones? ¿Querías salir de casa o quedarte en ella? ¿Querías hacer yoga o trotar? Comparando cómo te sientes mensualmente podrás darte cuenta de que muchas veces hay un patrón, y utilizando esta información puedes sacar gran provecho para ser más creativa e intuitiva.
Las cuatro fases del ciclo menstrual
En el libro Luna Roja, Miranda Gray cuenta que la mayoría de las mujeres mantienen una interacción con el ciclo lunar de una de estas dos formas: sus menstruaciones coinciden con la fase de la luna llena o bien con la de la luna nueva.
Según la autora es posible que el ciclo femenino no tenga exactamente la misma duración que el lunar, pero puede alargarse o acortarse para que cada mes la menstruación aparezca en un momento próximo a una de esas dos fases.
Estas son las cuatro fases que nos acompañan mes a mes:
1.La reflexiva: es la etapa que va desde el día uno del ciclo hasta el siete (1-7) que se anuncia con la llegada de la menstruación, y coincide con alguna de las dos lunas, nueva o llena, aproximada o exactamente el mismo día.
La energía de la luna llena nos permite dejar ir lo que no necesitamos y la energía de la luna nueva ayuda a manifestar nuevos comienzos.
Escucha a tu cuerpo, en este momento tu intuición está más despierta que nunca. Normalmente, tienes menos energía, lo que hace que tiendas a resguardarte en tu mundo interno. Aprovecha este periodo de introspección para buscar soluciones a cualquier problema.
2. La dinámica: desde el día siete hasta el catorce (7-14) depende de la luna con la que menstruaste, la dinámica coincide con la menguante o creciente.
La luna menguante nos potencia la energía de la aceptación y gratitud, y la creciente es energía renovada, nos ayuda a poner atención a los detalles y enfocarnos.
Durante esta etapa la mujer tiene confianza en sí misma, gran poder de concentración y es ambiciosa. Este tiempo beneficia los nuevos comienzos, la energía para salir de tareas que te estaba costando terminar, y la inspiración y voluntad para crear.
3. La expresiva: desde el día catorce hasta el veintiuno (14-21) La expresiva o la Madre ocurre cerca del momento de la ovulación y es cuando estamos más radiantes. Coincide con la luna contraria a la que te acompañó en el inicio de tu ciclo, si menstruaste con la llena, durante esta fase tendrás contigo la energía de la nueva, o viceversa.
Esta energía alimenta proyectos, negocios creativos o ideas que ya existen. Aprovéchala si tienes algún emprendimiento o si tienes alguno en mente.
4. La creativa: desde el día veintiuno hasta el veintiocho (21-28) o más, dependiendo de la duración de tu ciclo, la creativa o hechicera reconoce su propia magia, poder y creatividad. Acompaña a la luna en sus fases menguante o creciente.
Utiliza este momento para inspirarte y tomar nota de las ideas creativas que te llegan durante esta etapa.
La sincronización de nuestras energías internas con las de la luna nos permite crear un mapa único y personal. Cultivemos el hábito de escucharnos y observarnos con paciencia e intuición. De ahora en adelante, cuando observes la luna por la noche podrías preguntarte cómo te afecta a nivel emocional e intuitivo la luz que ella nos regala.
Imagen de portada: Agenda 2020 Magic of I (@magic_of_i)