Buenas prácticas para una piel en solsticio

por | Jul 6, 2022

Para una rutina skincare sólida, natural, mínima y lenta en cambio de estación.

Antes de entrar a la receta mágica para acompañar tu piel durante las transiciones asociadas a los solsticios, te recuerdo que comprender más y mejor qué productos deben estar en tu cosmetiquero de invierno, según la biología de la piel, es fundamental si estás viviendo el solsticio de invierno. Además de entender —conocimiento es libertad— qué pasa con tu piel cuando se expone al sol, si estás en el lado del hemisferio norte, todo esto te ayudará a construir una rutina skincare sólida, natural, mínima y lenta; y sobre todo, apta para determinar cuál es tu tipo de piel y cómo debes cuidarla.

Ahora, vamos a lo que nos convoca. Con la llegada del solsticio algunas técnicas que nos  pueden ayudar a cuidar nuestra piel, durante estos periodos de transición al frío más frío y al calor más sudoroso, pueden ser:

  1. Si estás en invierno, bienvenidos los productos fotosensibles

Si estas como yo viviendo el invierno, es buen momento de usar todo los tratamientos fotosensibles que no deberías utilizar en días muy soleados, como los hidroxiácidos (ácido glicólico, ácido láctico, polihidroxiácidos como la gluconolactona, etc.) o retinoides, generalmente presentes en fórmulas antienvejecimiento o que estimulan la regeneración. Te invito a revisar en detalle ¿qué cosméticos evitar durante el verano? e identificar los componentes fotosensibles de tu cosmetiquero.

Foto: Productos de la marca de cosmética natural Paihuen. Créditos: Paihuen.
  1. Reseteate con una saturación de aceites

Independiente si estás en invierno o verano, algo que siempre sumará en el cuidado de la piel —de todo nuestro cuerpo— es el uso de aceite. Ya sea como humectante, emoliente y sobre todo, como terapia salutogénica, es decir, como terapia de conservación, bienestar y crecimiento.

El aceite es la máxima concentración del calor de una planta, y esa es justamente su mayor virtud. El uso de aceites de semillas en combinación, o no, con aceites esenciales tiene enormes beneficios tanto para la piel como para la salud en general. Eso lo sabe muy bien la ayurveda.

En sánscrito la palabra sneha significa tanto aceite como amor, osea, el masaje con aceites calientes tiene, en quien lo recibe, los efectos de estar saturados de amor. Si nunca has probado nada parecido es un must que debes buscar en tu ciudad y experimentar. Ojalá que sea un masaje personalizado, según tu constitución y desequilibrios, así que es una buena bienvenida a un ciclo nuevo y polar.

Si por ABC motivos no puedes realizarte un masaje ayurvédico con aceites calientes, lo que sí debes hacer es sumar la aplicación de aceite 1 o 2 veces por semanas, en reemplazo de la tradicional y fría crema. Colócalo inmediatamente después de la ducha, aprovechando la humedad y temperatura del baño. Aplica un aceite de semillas como el de almendra, linaza o jojoba sobre todo tu cuerpo, con masajes suaves, circulares y ascendentes, así de paso estarás estimulando tu sistema linfático. No te olvides de aquellas zonas rezagadas de la piel (pies, axilas, genitales, etc.) y permite que el aceite se absorba y luego, vístete.

Aplica un aceite de semillas como el de almendra, linaza o jojoba sobre todo tu cuerpo, con masajes suaves, circulares y ascendentes, así de paso estarás estimulando tu sistema linfático. Además, de contratar un masaje terapéutico centrado en tu bienestar, puede ser ideal en esta época del año.

  1. Atrévete a probar nuevas rutinas y productos más sustentables

Un cambio de estación es el momento perfecto para hacer cambios en nuestra rutina. Así que anímate a probar: un shampoo en barra, que hace tiempo te hace más sentido que el tradicional contenido en botella plástica y sumate a #juliosinplasticos; incorpora aceites esenciales a tu rutina, puedes incluirlos en el mismo aceite corporal que ocupes post ducha o utilizarlo como un SOS en momentos específicos; y anímate a la revolución de los calzones menstruales y eliminar plásticos, y sustancias tóxicas de tu menstruación.

Quizás estas tres buenas prácticas pueden sonar evidentes o muy simples, pero las transformaciones reales, comienzan así. Paso a paso, con pequeños gestos repetidos que tornan nuestro devenir en uno más simple, sustentable y con sentido.

Queremos leer tu experiencia y datos, así que compártelos con nosotras en las redes sociales, o escribiéndonos a [email protected]. Es un tiempo nuevo, vivámoslo con el cariño a flor de piel.

LECTURAS RELACIONADAS QUE TAMBIÉN PUEDES DISFRUTAR:

Cofundadora de Paihuen.co [@paihuen.co], bioquímica de orientación antroposófica e investigadora etnobotánica, con 7 años en el desarrollo de ingredientes y productos skincare. Como defensora de la piel al natural, quiero acompañar tu transición que #avanzaalonatural, y devolverte el poder sobre su cuidado. @mariaj.romerosilva

Podría interesarte